Los recién nacidos, por lo general, no se parecen a los bebés lindos que salen en los anuncios de pañales. Muchas veces tienen la cabeza más puntiaguda que redonda. La piel puede ser rojiza y arrugada. 
A veces, el bebé tiene manchas rojas oscuras en los párpados. También pueden aparecer en la nariz o en la parte posterior del cuello. Nadie sabe qué las causa, pero generalmente, desaparecen dentro del primer año de vida. 
Sobre la nariz y/ó sobre sus mejillas se pueden notar unos puntitos blanquecinos, que corresponden a las glándulas sebáceas inmaduras. Desaparecerán con el correr de los días. 
Algunos bebés nacen sin cabello, otros con cabello muy fino y otros aún con mucho cabello oscuro. En muchos, el cabello de recién nacido cae, en otros, cambia de color.
El color de los ojos también puede cambiar después de nacer. Por lo general, para el final del primer año de vida se fija el color de los mismos. 
En el centro de la cabeza de tiene una parte blanda donde los huesos del cráneo todavía no se han unido. Esto permite que su cabecita sea flexible durante el parto. A medida que el bebé crece, el cráneo crecerá y cubrirá esta parte blanda. 
La parte del cordón umbilical que permanece en él después del nacimiento se cae en un período de 5 a 10 días. Lo que queda se convierte en el ombligo. 
Algunos bebés, indistintamente del sexo tienen los pechos hinchados. Hasta quizá les salgan unas gotitas de leche al nacer. Las hormonas de la mamá causan esto. No es nada malo y desaparece rápidamente.

Tu bebé recién nacido es totalmente dependiente y sus necesidades enormes.
Necesita que otros lo cuiden, lo alimenten, lo carguen en brazos y jueguen con él.

• Le gusta estar calentito y sin mucho ruido.

• Le gusta dormir mucho.

• Tiene hambre cada dos a cuatro horas.

• Puede que esté quisquilloso y que llore mucho.

• Necesita que le cambien el pañal en cuanto lo moje o ensucie

• Reconoce la diferencia entre sus padres y las demás personas.

 

Un recién nacido tose, bosteza, estornuda, llora, tiembla. Es capaz de reaccionar ante cualquier cosa que lo sobresalte. Sus reflejos incluyen chupar, hociquear, buscar el pecho de su madre.
Sus ojos pueden ver, hasta unos 25 cm.

Relación con el médico: 

El primer examen del bebé, que dura alrededor de 10 minutos, (test de Apgar) se hace inmediatamente después de su nacimiento. En el mismo se tienen en cuenta determinados signos vitales: ritmo cardíaco, patrón de respiración y llanto, color de la piel, tonicidad muscular y reacciones reflejas. Estas mediciones y observaciones se toman en tres momentos distintos dentro de los primeros cinco minutos de vida. De acuerdo con los resultados obtenidos el médico evaluará si el bebé requiere atención especial de inmediato. Se vuelve a hace otro similar en la primera consulta médica del bebé. Ésta tiene que hacerse una semana después del nacimiento. 
Al bebé además se le toma una muestra de sangre del cordón umbilical para laboratorio inmediatamente cuando nace, luego se le tomará una pequeña muestra de sangre del taloncito, para hacerle otros análisis. 
Luego tu bebé necesitará exámenes médicos durante los primeros días, la primera semana y hasta el primer mes por el Neonatólogo y luego ya por su Pediatra cada mes hasta el sexto y cada dos meses hasta el año de vida, para que el doctor pueda asegurarse de que está creciendo bien. Acudir a los exámenes médicos es algo normal e importante aunque el bebé parezca estar sano. La manera como crezca el bebé el primer año puede afectar su salud a lo largo de la vida.
En cada examen el médico examinará la cabeza, los ojos, los oídos, el corazón, los pulmones y las otras partes del cuerpo, medirá la estatura del bebé, el tamaño de la cabeza y lo pesará, preguntará sobre cómo ve y oye el bebé, preguntará sobre su apetito, el sueño y el comportamiento del bebé y te dará información sobre cómo se desarrolla y crece tu bebé.

 

Te recordará el calendario de vacunación y podrá contestar cualquier pregunta que tengas.